El saldo neto turístico de la economía española ha terminado el año 2008 en el 2,7% del PIB nacional. Su trayectoria ha sido descendente desde el año 2000 en el que la cifra se situó en el 4,2% del PIB. Podemos identificar varios aspectos detrás de este descenso:
- El mayor incremento en la cifra de turismo emitido frente al recibido. Así mientras el primero ha crecido un 110% desde el año 2000, el segundo lo ha hecho sólo un 37%.
- El aumento de PIB en mayor proporción que lo ha hecho la cifra de turismo receptor. Esta última ha crecido una media del 4% a precios corrientes, mientras que el PIB español ha crecido a una tasa superior.
- Aun cuando se observa una pérdida de importancia del sector turismo recibido del 5,8% del PIB en el año 2000 hasta el 4,6% en el 2008, la cifra absoluta ha crecido en 13.501 millones de euros, lo que implica que España sigue manteniendo su estatus como potencia turística mundial.